1° de Febrero 2025.
Ciudad Valles San Luis Potosí a 1° de febrero del año del señor 2025
Año de la alegría
-Hija mía cuanto, sin verte, sin escuchar de ti-Dicen algunas madres por el mundo y así yo hoy, tu madre María del cielo santo de Dios.
Y es que las madres quisiéramos que, en todo tiempo, como cuando niños que eran acariciarles, besarles y jugar con ellos.
Así yo hoy te veo sonreír y la alegría flota en el viento y llega hasta el cielo.
Veces hay en que solo tristezas o preocupaciones veo en tus ojos; la fe hija mía es ese aditamento que les permite ser más grandes que cualquier problema o incertidumbre.
Que la alegría siempre ilumine sus ojos, al saberse amados por su Padre del Cielo.
Es sabido que con sus solas fuerzas no es posible sobrellevar la vida. Cobíjense en los brazos de Jesús y de ésta su Madre que siempre los llevamos en nuestros corazones.
A todo el mundo les digo la hora ya está cerca en que los ángeles del Cielo desciendan a la Tierra para acompañarles en Los Tiempos que desde antaño se les dijo que llegarían.
Mi hijo desde su Cruz Bendita me sonrió, porque sabía que Él es eterno y que los hijos del Padre solo aceleraban su regreso, solo les miraba con misericordia pues no sabían lo que hacían. Aún hoy lo hace.
Todas las oraciones son escuchadas, ninguna se desperdicia.
Tus ayunos son de gran ayuda.
Confíen y guarden la esperanza de los Santos.
Desconfíen de quienes buscan solo riquezas, de aquellos que con engaños venden patrias, venden Almas; de aquellos incrédulos que piden dinero para ofertar a Dios.
El Dios vivo es para todos, Él se da en la Eucaristía. En el silencio de tu habitación también.
Que no los engañen con coronas falsas.
Ustedes saben que la palabra de Dios es única.
Cuando Dios habla, habla el Espíritu de sabiduría, habla el Grande Uno y Trino y su vos es cayada, pausada sin grito.
El altanero y gritón es el Diablo.
¿Saben? El mal a tratado por todos los medios de jalarles.
Ustedes abríguense en el amor de Dios en su Palabra Viva y vivificante.
La alegría reine en sus corazones de Santos hijos de Dios Altísimo. Mis hijitos por el mundo se pierden entre tantas ofertas del mal.
Hijitos cubran sus cuerpos como antaño, con respeto condúzcanse ante el Altar.
Les perdono porque les amo, así dice mi Dios y así yo misma les digo, no tengo ofensa alguna que me duela porque se que toda pena es depuesta por Dios.
Yo les amo con locura- como dice Gü. Les amo a mis retoñitos Santos y les ilumino la vía, les aliento a seguir con la frente en alto por la Vía Santa del Ruiseñor de María que es Jesús.
Los asientos están revueltos- diría tu abuela, los asientos del café, bastará dejar caer una taza de café encima para que se asienten.
Así les digo Yo, el mandatario a revuelto los asientos, las bases, las leyes u ordenanzas para que mis hijos teman y se tambaleen.
Déjenlo hacer porque ya viene uno que es mas grande y fuerte y lo callará, al que vocifera y espanta.
Habrase visto querer violentar a quien no le hace un daño a quien sólo beneficio trae.
Miren que las ratas regresan a su cloaca.
No teman al mundo porque es Dios quien les gobierna, quien les cuida, quien les mueve.
Y si te quita de un lado no es para mal de eso estoy segura.
Tomen las cosas con calma y esperen en Dios que solo el tiene la primera y última palabra.
Confíen, crean, oren y alaben a su Dios.
Pongan un poco de freno a esas vidas tan aceleradas que llevan.
Sean dueños de su tiempo, sí está bien que tengan esparcimiento, pero háganlo en viento libre, en el campo y no bajo la cochera, bajo techo o en su cuarto encerrados.
Vivan el Sol, la lluvia, el campo y los ríos. Vivan corran, jueguen con las olas del mar y vuelvan a poner columpios bajo la sombra de un árbol.
Han desdibujado el paisaje. Dibujen sus vidas con amor.
“Que no les vuelvan a infundir el miedo bajo amenaza de contagio”
Bajo el cielo del Dios bueno no hay amenaza.
la amenaza viene del mismo hombre.
Júntense, compartan, ámense y diviértanse sanamente.
Que Dios alimente su fe y muestra el mejor camino de salvación, que su esperanza nunca muera, que sean compasivos con el que sufre y que sepan que ustedes son grandes pensadores y que lleven a buen fin sus sueños. Eso les desea esta su madre María mi bendición aumentada que Jesús muestre su rostro aleluya aroma de rosas les dejo.
María